La presidenta del Colegio de Matronas, Anita Román, comentó en Una Nueva Mañana de Cooperativa algunos casos de mujeres que llegaron embarazadas al centro asistencial producto de violaciones.
En la entrevista, la matrona Anita Román relató crudas experiencias de mujeres que habiendo sido violadas, se practicaron abortos que le provocaron serios daños al bebé o, en muchos casos, terminaron con la mujer muerta.
En uno de ellos, una mujer que trabajaba como empleada doméstica llegó con la intención de dar a su bebé en adopción tras ser violada constantemente por su empleador y provocarse varias maniobras abortivas frustradas, y luego de recibir a la guagua que nació con doble fisura palatina en su vientre, revirtió su decisión. Román, al perder el contacto con la mujer, se comunicó con la fundación que la apoyaba, donde le dijeron que se había suicidado.
Otro caso, una chica, acusada de “asesina” por el detective que la llevó al Centro asistencial, tenía 15 años y llegó muy choqueada y no hablaba. La chica se había embarazado, no le dijo nadie a su familia.Comenzó con trabajo de aborto en su casa. Hizo el aborto en el baño, tomó el bebé y lo tiró a la basura. No le dijo nunca a nadie excepto a una amiga del colegio. Tras 30 días la amiga la denunció. Cuando llegó la mamá los detectives la tomaron detenida por “cómplice”. Nadie contuvo a la niña.
En otro, una mujer que llegó grave de madrugada después de intentar realizarse un aborto comenzó a toser y falleció tras sufrir un edema pulmonar, porque nunca informó a las matronas que se había metido un perejil que le había provocado una infección.
Otro caso, una niña de 13 años que llegó con un embarazo de 33 semanas, había estado siendo constantemente violada por alguien de su familia. Su diagnóstico fue de feto inviable, su guagua vivió unas horas. Ahí recién su familia se preocupó. Ahora llegó su hermana embarazada producto de violación.
También está el caso de una señora que llegó embarazada porque el marido la violaba. Esta señora llegó muy mal, llegó a las 12 del día y a las 2, estaba muerta. Si esa mujer hubiera tenido dinero, probablemente no habría muerto. Ella se había puesto una sonda para abortar y le dio una infección generalizada.
En uno de ellos, una mujer que trabajaba como empleada doméstica llegó con la intención de dar a su bebé en adopción tras ser violada constantemente por su empleador y provocarse varias maniobras abortivas frustradas, y luego de recibir a la guagua que nació con doble fisura palatina en su vientre, revirtió su decisión. Román, al perder el contacto con la mujer, se comunicó con la fundación que la apoyaba, donde le dijeron que se había suicidado.
Otro caso, una chica, acusada de “asesina” por el detective que la llevó al Centro asistencial, tenía 15 años y llegó muy choqueada y no hablaba. La chica se había embarazado, no le dijo nadie a su familia.Comenzó con trabajo de aborto en su casa. Hizo el aborto en el baño, tomó el bebé y lo tiró a la basura. No le dijo nunca a nadie excepto a una amiga del colegio. Tras 30 días la amiga la denunció. Cuando llegó la mamá los detectives la tomaron detenida por “cómplice”. Nadie contuvo a la niña.
Otro caso, una niña de 13 años que llegó con un embarazo de 33 semanas, había estado siendo constantemente violada por alguien de su familia. Su diagnóstico fue de feto inviable, su guagua vivió unas horas. Ahí recién su familia se preocupó. Ahora llegó su hermana embarazada producto de violación.
También está el caso de una señora que llegó embarazada porque el marido la violaba. Esta señora llegó muy mal, llegó a las 12 del día y a las 2, estaba muerta. Si esa mujer hubiera tenido dinero, probablemente no habría muerto. Ella se había puesto una sonda para abortar y le dio una infección generalizada.
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