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sábado, 19 de octubre de 2013

Una historia muy diferente a las demás..

Luego de leer varias historias, les mando aqui la mia.

Me llamo Maria, vivo en Alemania hace un año y medio aproximadamente. El motivo? El amor....

En diciembre de 2005 sali a tomar unas cervezas con mi mama, su esposo y mi hermana. Nos sentamos en el bar de un amigo, donde suelen ir varios alemanes residentes en Paraguay, no sera un lugar muy lindo, ni agradable, ni nada, pero el duenho es austriaco, y como habla aleman, la mayoria de los habitues son alemanes, suizos y austriacos...

Ahi conoci a un aleman que estaba de vacaciones, visitando a su familia, empezamos a salir y al cabo de unas semanas me invito a venir con el. La propuesta me era por demas interesante, yo nunca congenie con la idiosincracia del tipico paraguayo: tekorei, nhembotavy, mbarete, caigüe, el maomeno, el a lo luque, eju lune, manhana sin falta seguro, el machismo, la impuntualidad, la informalidad, el abuso de autoridad, el amiguismo... y a eso se le puede sumar la falta de trabajo, la explotacion laboral... en cada nuevo trabajo ganaba menos y menos y menos! hasta llegar al colmo de que lo unico que me quedaba era trabajar gratis. Siendo profesional es lo ultimo que haria!

El se quedo alla hasta finales de febrero, luego, por motivos de trabajo regreso a Alemania, despues de tramitar (previo recurso de amparo) mi pasaporte, vine a principios de 2006. En agosto nos casamos, tuvimos mellizos...

Hoy dia, mi familia esta aqui, en Alemania. Si extranho Paraguay? La comida tipica.... creo que es lo unico que, ademas de la familia o los amigos uno puede llegar a extranhar.

Aqui todavia los ninhos pueden andar por la calle sin ningun peligro, puedo olvidarme la llave puesta del auto y nadie lo toca, puedo, en un club de futbol, dejar mi cartera, con dinero, celular, tarjetas de credito, en una silla y a nadie se le ocurre meter mano.

Yo no creo que vuelva a vivir a Paraguay... lastimosamente mientras estuve ahi mas y mas puertas se fueron cerrando... Por suerte Dios me escucho. Mi esposo es la persona que siempre sonhe conocer.

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